22 oct 2008

breathe again



El sol cayendo a una velocidad aterradora, capaz de atropeyar a cualquier nube que se interponga. Daba el aviso de que los relojes seguian normales, excepto aquel. Cuando la nueva cuerda tensa de la guitarra recién afinada fue tocada al compás de las manos contra el suelo, soltándose de a poco apesar de los golpes, acomodándose. Las fotografías comenzaron a hablar, aunque movían los labios pero no se oía palabra alguna, lo que atrajo la atención de todos los que se encontraban en el salón de la mitad del pasillo a la derecha. Todos observaban absortos y maravillados las imagenes moviéndose solas, todos creían estar pendientes de lo más importan que allí había. Excepto ella, que atravesaba la extensa sala hasta llegar a un florero con agua donde poner a las recién llegadas. Ella no se sorprendía por las fotografías, porque sabía lo que estaba pasando. Sus ojos no necesitaron comprobar que los recuerdos impresos no estaban hablándole a la gran masa de expectadores que tenían, sino que cantaban sordamente hacia la puerta del norte, esa que daba al jardín. Sus ojos simplemente advirtieron la gran cantidad de nubes que escapaban en todas direcciones,
despavoridas, chocando unas con otras, para irse de aquella casa y darle paso al brillante sol.

.. y entonces el ángel le sonrió.


19 oct 2008

calambres en el alma



Esos calambres en los que te puedes mover, pero no eres capaz de pensar en algún alivio posible. Nisiquiera puedes hablar, producir sonido. Escribir no sirve. Las manos tiritan tanto que no se puede sostener nada con firmeza. La garganta duele.. no por la cajetilla de cigarros que fumaste en el puro día, sino por el nudo triple que se fue formando a medida que las horas pasaban. No de los normales, esos que con los minutos van desapareciendo.

Calambres que llegan de improviso, que con cada minuto y cada palabra duelen más y más..


Malditos calambres en el alma.



15 oct 2008

asi es.



ese, al que le quedan pesadillas por derrumbar,
mientras que deja una sonrisa sobre la blanca mesa.

si, él.



.. el ángel más real que mis ojos hayan visto.





12 oct 2008

eso.



Mantener la mente ocupada al cien porciento para no caer en el tiempo comienza a preocuparme, aunque no lo pienso mucho, asi que tampoco me preocupa tanto. Este tiempo no he pensado casi nada en mi, pero tampoco estoy pensando en los demás. No estoy pensando, no encuentro mejor forma de decirlo. Y prefiero no pensar, porque así no me doy cuenta de que el tiempo sigue pasando aunque yo me oponga, aunque me resulta imposible estar tranquila un minuto sin pensar, excepto en ciertos momentos.. o más bien, cierto momento.

Un par de pesadillas habré tenido hace poco. Había olvidado lo que era despertar a las 4 de la madrugada con la respiración agitada mientras la cabeza da vueltas en cosas que nisiquiera tienen sentido. Era desagradable, y con el paso de los años lo sigue siendo. Me concentro en ocupar cada minuto con algo, cada segundo. Incluso durante el almuerzo trato de concentrarme en lo que estoy comiendo, las marcas en la mesa o las cosas superficiales que me hable otra persona cuando cuento con compañía -
debo decir que me molesta lo suficiente ese momento del día como para empeorarlo con mis pensamientos indebidos-.

.. y vuelvo a pensar, aunque me de miedo hacerlo.


1 oct 2008

October skies.


Hola, Octubre - dijo apenas despertó y vió que por su ventana se asomaban los primeros rallos de sol del día. A las 7:24 se puso su chaqueta color gris y se recogió el cabello, trató de armar un plan de día, aunque pronto recordó que esos planes jamás le resultan, y a las 7:26 decidió que era mejor llevar el cabello suelto.

La mente no se encontraba tan dormida cuando el reloj del celular mostró las 7:57.

¡Ruido!

y tiempo... maldito tiempo.



Hola de nuevo, Octubre - dijo, esta vez con desánimo
"Recuerda que confío en ti.. confiamos en ti".
.. y entonces comenzó a llover

Su sonrisa volvió veinte segundos después,
cuando vió que no llevaba paraguas aquel día.